La gama de híbridos Cleveland se centra en mover el peso hacia abajo, haciéndolo más profundo para que el golfista produzca un despegue más elevado y largo desde cualquier lie.
Una solución de los ingenieros Cleveland es la tecnología Gliderail, con la que un par de raíles ayudan a que el palo se deslice a través de la hierba, aumentando la velocidad de la cabeza y la distancia. Cleveland explica que estos raíles permiten estar en una posición perfecta desde cualquier parte del campo gracias a una confianza que inspira un golpe perfecto sin importar la distancia. Además los raíles también aumentan el peso de la suela del palo, lo que rebaja el centro de gravedad para mejorar las condiciones de despegue.
Otra solución es el uso de la corona Hi Bore, derivada del diseño de drivers y maderas. El diseño cóncavo también permite agrandar la cara sin afectar el volumen de los palos. Una cara más grande aumenta naturalmente el tamaño del punto dulce y conseguir una distancia más constante en los golpes descentrados.
Si echamos un vistazo al catálogo histórico de Cleveland, hay un híbrido que destaca y ese es el Mashie. Este palo era más fácil de manipular y polivalente, y desde su lanzamiento tenía una presencia fija en las bolsas de golf por casi una década.
Cleveland Golf es una marca puntera en la industria, y su objetivo es ayudar al golfista a mejorar, para que pueda golpear la bola lo más lejos posible, más recto y cerca del hoyo. Esta filosofía ha ayudado a la reputación de Cleveland por más de 40 años.
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